BOHEMIAN RHAPSODY

La estética bohemia se mantiene muy viva en Bomé, el atelier de San Miguel conocido por sus bolsos de suave piel y por sus cinturones decorados con piezas de plata vieja. El estudio y la tienda se llamaron inicialmente Dario Bomé, como el artesano del cuero y patriarca de la familia, pero cambiaron de nombre cuando Paloma, la hija de Dario y Valeria, regresó a Ibiza en 2015 después de dedicarse al diseño de vestuario teatral y cinematográfico en Barcelona y Madrid. “Quería mantener la tradición de mis padres porque es una parte muy importante de mi vida”, explica Paloma. “El olor del cuero, el taller, el aceite… Todo eso me resulta muy familiar.”

La historia de Bomé se remonta a 1975, cuando Dario y Valeria llegaron a Ibiza desde Italia y cayeron rendidos ante la magia de la isla. Tuvieron uno
de los primeros puestos en el famoso mercadillo de Las Dalias, donde vendían antigüedades, objetos curiosos y algunos artículos de cuero creados por Dario. Los viajes de la pareja por la India y Nepal hicieron crecer la colección. “A mi padre siempre se le ha dado bien crear cinturones y acabados especiales, aunque su trabajo más famoso es la mochila”, comenta Paloma, “mientras que mi madre tiene muy buen gusto y es capaz de combinar distintos elementos de una forma muy especial”.

También Paloma quiere aportar su granito de arena a la tradición familiar. Para ella, eso significa perfeccionar su lenguaje de diseño mientras se encarga de las comunicaciones de la tienda, aunque su objetivo principal es seguir trabajando con las comunidades de artesanos, tejedores y tintoreros de la India. “Es fantástico poder trabajar en la India con los hijos de quienes han colaborado con mis padres. Sentimos que son parte de nuestra familia y ése es nuestro mayor tesoro.”