VICENTE GANESHA

CONOCIDO COMO MR. IBIZA, VICENTE HERNÁNDEZ ZARAGOZA ES EL FUNDADOR DE UNA DE LAS BOUTIQUES MÁS CONOCIDAS DE LA CIUDAD DE IBIZA, FAMOSA POR SU EXCLUSIVA ROPA VINTAGE Y SUS PRENDAS INDIAS FABRICADAS A MANO.

“Soy de Guardamar, en Alicante. Llegué a Ibiza en 1971 y en 1976 abrí una tienda en un local distinto a éste. Allí vendía muchas marcas de moda, como Valentino, pero unos años después lo perdí todo. Lo único que conservé fue mi Filofax y mis contactos. En 1991 abrí esta tienda, donde vendo ropa de segunda mano y diseños que fabrico en la India. La primera vez que visité la India fue en 1982. Me sentía perdido, pero la India me abrió la mente y me ayudó a conocerme mejor. Hasta entonces nunca había diseñado moda, pero sabía lo que le gustaba a la gente porque trabajaba con ropa de segunda mano.

Creo que el estilo es algo que se tiene o no se tiene. Antes, quizá más que ahora, el estilo en Ibiza era una filosofía y había más libertad. Se trataba de vivir de una cierta manera. Las personas necesitan creatividad. Todos tenemos que creer en algo. La verdad no se encuentra en la historia ni en la política, así que lo único en lo que podemos confiar es en los sentimientos que nos inspiran el arte y la música. Y el amor, claro. Tengo 75 años, pero creo que nunca veré la vida como un viejo porque confío en el amor y confío en el arte. Para encontrar estas cosas, tienes que hacerlo a tu manera. No seguir las normas, sino crear tus propias normas.

Ibiza es una inspiración para mucha gente. No sé si será el clima, la luz o las circunstancias lo que hace que aquí sea posible creer en algo creativo. Estar en Ibiza te hace sentir enamorado sin necesidad de un amante.

Esta actitud ante la vida me parece fantástica: ver el infinito, tomarte tu tiempo para hacer las cosas y disfrutar de ellas. Las cosas cambian, por supuesto. Nada es estático, pero todavía es posible descubrir esa Ibiza si te levantas a las siete de la mañana y vas a un rincón de la isla donde nadie va.

Tengo muy buenos amigos aquí. A muchos de ellos los he conocido en la tienda. Tenemos algo en común, como el gusto por el arte o la música o simplemente el amor a Ibiza. Cuando más me gusta la isla es en temporada baja, durante el invierno.

Ha habido muchos momentos especiales. Para mí es muy especial que una persona se lleve una buena impresión de la tienda y tenga ganas de volver. Mi tienda es diferente, no está hecha para turistas normales. La gente que viene aquí busca algo único y sabe apreciar lo diferente. Cree en lo que hago y en mi forma de hacerlo. Además, mi tienda está en un cruce de muchas calles donde pasan montones de cosas, así que mucha gente la descubre por casualidad. Soy muy afortunado por vivir y trabajar aquí.”